MAD MAX: FURY ROAD (Los cómics precuela)

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Hoy en La Muvida queremos traeros algo especial. Hace pocos días se puso a la venta en nuestro país “Mad Max: Fury Road” en formato Blu-Ray, Blu-Ray 3D y DVD, una edición cargada de extras que os recomiendo (con unos documentales sobre el rodaje, personajes, producción, etc… extensos y muy buenos).

Pero no sólo de cine vive el cinéfilo, o al menos, no todo el universo devastado del loco Max que aparece en la última película está en el metraje de la misma, por eso, y porque el material que os dejamos en el Link, refuerza, expande y completa lo que vemos en “Fury Road” creemos que es importante e inexcusable la lectura de estos cómics.

Los cómics que os dejamos a continuación son una suerte de precuela oficial del film, están escritos por el propio George Miller junto con Mark Sexton y Nico Lathouris. Miller nos cuenta a través de los personajes cómo fue la guerra, destrucción y decadencia de la sociedad australiana que Max nos narra al principio “Fury Road”, cómo fue el ascenso de “Immortan Joe” al poder, quién es Furiosa y cómo el mundo la transformó, quién es Nux y cómo llega a ser un soldado de la ciudadela, etc…

Estos cómics son “Canon” oficial, es decir, lo que se narra en ellos cuenta para futuras películas que se rueden. Es el propio Miller quien decidió editarlos ya que en el proceso de escritura del guión de la última película, al pasar tantos años hasta que pudo ver la luz, Miller escribió tanto material que al final no pudo filmarlo todo (como ahora sabemos que va a rodar más secuelas, parte de lo que sale en estos cómics es probable que acabe siendo referenciado en alguno de los siguientes films).

Los cómics están editados por VERTIGO, tienen un arte excepcional y muy fiel al universo de Max y a lo que vemos en el último film, y están en perfecto castellano. De momento sólo hay dos números, pero en La Muvida os iremos poniendo los siguientes según vayan saliendo.

Podéis descargarlo aquí MAD MAX

 

 

Por Adrian Alfaro

¿SOBREACTUACIÓN? (sobreactuaciones necesarias)

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Siempre me ha llamado la atención que se considere que ciertos actores “sobreactúan” a la hora de afrontar ciertos personajes, e incluso por defecto. No voy a negar que este concepto existe, pero no es único de actores considerados como malos o mediocres y desde luego me hago estas preguntas, ¿es malo que se sobreactúe o exagere?, ¿hasta qué punto se puede considerar que un personaje excéntrico deba ser más comedido a la hora de ser representado en pantalla?

¡Pues a mí me gusta! Y voy a poneros varios ejemplos de actores y personajes “sobreactuados” que siempre me han parecido geniales.

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AL PACINO

Hablar de Al Pacino, es hablar de uno de los mejores actores de todos los tiempos.

Desde sus papeles en “El Padrino” o “Tarde de perros” Pacino se ha labrado un nombre, una personalidad y una capacidad casi infinita de interpretar personajes de todo tipo…pero no son pocos los que le acusan de sobreactuar excesivamente, sobre todo desde mediados de los 90.

A mí, personalmente, me sigue impresionando su interpretación en “Pactar con el Diablo”, me parece soberbio y creo que sinceramente el diablo debe ser así, trilero, exagerado, altanero, egocéntrico, manipulador, con sonrisa burlona y maneras trasnochadas… no se trata de dar miedo, sino de que te dé esa sensación de que es alguien camuflado en la sociedad como un triunfador, casi como un político.

El diablo de Pacino habla dando mítines y sentando cátedras: … “mira, pero no toques… toca, pero no pruebes… prueba, pero no saborees… y mientras dios os lleva como marionetas sabes que hace… ¡¡¡se parte de risa… es el peor casero del mundo!!!”… y todo esto lo suelta gesticulando, gritando y sacudiendo la conciencia de manera exagerada, sobreactuando.

Pero amigos, es que eso es el personaje y Al Pacino lo borda, incluso cuando sobreactúa.

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GARY OLDMAN

Este pedazo de actor está considerado un ente sobreactuado en sí mismo, sin embargo, es por la energía y meticulosidad que ofrece a cada personaje que interpreta, cuando acierta en el papel, lo borda y es capaz de hilvanar unos villanos antológicos.

El papel de detective corrupto, psicópata, maquiavélico y sátrapa que Oldman nos regala en “ León: el profesional” es sencillamente magistral. Nunca sabes por dónde va a salir, explota cuando menos lo esperas y se convierte en el ser más desagradable y cabrón que uno se puede imaginar.

Esa escena en el pasillo, donde está escuchando a Bethoveen de manera relajada y de repente se toma una pastilla mientras gira el cuello de manera extrañísima, se retuerce y pasa a ser su propio “Mr Hyde” es absolutamente brutal, pura mimetización con el personaje, sobreactuado, pero es que un detective como “Stanfield” lo es… y Gary Oldman lo sabía, por eso lo bordo.

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NICHOLAS CAGE

He aquí el rey de la sobreactuación y el desfase, muchos os preguntaréis por qué lo pongo en el artículo junto al resto de actorazos que lo componen. Sencillo, pese a quien pese y aunque su carrera le haya llevado al descrédito más absoluto, para mí Cage es muy buen actor y al igual que ha tenido actuaciones bochornosas (la mayoría por desgracia). Ha bordado actuaciones sublimes, no es por nada que ganase el oscar por “Leaving las Vegas”, o que esté genial en películas como “Señales del futuro” o en el film que ahora me referiré más abajo.

De entre todas las interpretaciones buenas de Cage, siempre me quedaré con su doble papel en “Cara a cara”, su doble interpretación es alucinante. Aunque aquí la custodia es compartida junto a John Travolta y los dos consiguen hacerte creer que son el contrario, sin embargo, en mi opinión es Cage quien se lleva la palma en esta película…su “Castor Troy” es demencial y absolutamente brillante (la gesticulación y esa mirada psicópata que sólo él sabe poner son de absoluto sobresaliente en un personaje que sería ridículo en cualquier otro actor), pero es que encima clava el papel de Travolta el resto de la película, con su propia sobreactuación “Travoltiana” ya que al cambiar las caras, el personaje de Travolta en la piel de Cage está en una situación desesperada y delicada… una delicia de papel en el que Cage sobreactúa de manera acertada y muy divertida.

Hay muchos más ejemplos de “sobreactuaciones” geniales…podría destacar a Jack Nicholson en “Infiltrados”, a Malcom Mcdowell en “La naranja mecánica”, o a William Shatner en “Star Trek 2: La ira de Khan” entre otras muchas.

Ciertamente creo que es todo un género y una manera de entender la representación de un personaje de manera más teatral, más visceral y enérgica, no creo que sea un defecto, muchas veces es una gran virtud en una película…¿vosotros que opináis?

Por Adrián Alfaro

BREAKING BAD (rememorando a Heinsenberg)

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Pues si, hoy en La Muvida queremos adentrarnos en una de las mejores series de todos los tiempos.

Breaking Bad es sobre todo, un viaje impresionante hacia el infierno de un hombre «Walter White», un infierno que el construye y que va cambiando la vida de los que le rodean y la suya misma. Es Walter el que se va convirtiendo en «Heinsenberg» a sabiendas, por mucho que intente excusarse en las circunstancias y en la familia, su viaje, realmente es el acto egoísta de un hombre gris, un profesor de química engullido en la rutina y el olvido que descubre que tiene un cáncer en plena crisis de los 50 descubriendo así su propio Mr Hyde, lo malo ( o bueno, según se mire ) es que este Mr Hyde llamado Heinsenberg le gusta más a Walter que la personalidad que había mostrado hasta entonces.

Cuando acabé de ver la serie me hice esta pregunta ¿por qué me cae bien Walter, sabiendo que realmente es el malo de la función?… sencillamente, porque no es un malo al uso, ¡que demonios! es que en el fondo a todos nos gustaría ser un poco como él y ser capaces de convertirnos en el cartel más grande de Albuquerque, sin horteradas y con un tipo con más cerebro del que parece llamado Jesse Pinkman (este apellido es un homenaje a Reservoir Dogs), lo de Jesse, es una procesión a parte, es la otra mitad del compendio y su viaje es el contrario de Walter, pero compartiendo camino.

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La serie está jalonada de grandes personajes, el cuñado de Walter (que además es un miembro de la DEA), la mujer de este (obsesionada con el morado, inestable y cleptómana), la mujer de Walter (inmensa Anna Gunn ), el hijo de Walter (con minusvalía), etc… eso sin pasar por alto la galería de secundarios memorables como Gus (un malvado impresionante, con dos caras, milimétricamente interpretado por Guiancarlo Exposito), Saul Goodman (personaje del que actualmente hay un Spin off muy bueno llamado ‘Better Call Saul’), Tuco Salamanca, el hombre tortuga, y un largo etc. Lo mejor, que hay sitio para todos, los personajes están muy bien desarrollados y cada uno tiene una función distinta memorable en la serie.

(L-R) Mike (Jonathan Banks), Saul Goodman (Bob Odenkirk), Jesse Pinkman (Aaron Paul), Walter White (Bryan Cranston), Marie Schrader (Betsy Brandt), Hank Schrader (Dean Norris), Skyler White (Anna Gunn) and Walter White, Jr. (RJ Mitte) - Breaking Bad - Gallery - Photo Credit: Frank Ockenfels/AMC

En la parte técnica, la serie es una maravilla, destaco el uso de los filtros de color en cada capítulo, que hace que te metas en las emociones de los personajes de una manera instantánea (por poner un ejemplo, el filtro de color cambia según vemos a Walter o a Heinsenberg), el ritmo de la serie es envidiable, casi perfecto, ningún capítulo se hace pesado, las transiciones, esas tomas desde el fondo de objetos, y una banda sonora muy bien escogida en la que destacan temas como Baby blue (Badfinger) o Heinsenberg (Los cuates de Sinaloa).

El guión y la trama es simplemente magistral, no hay nada al azar, al final todo encaja de manera milimétrica y concisa, y ese es otro de los puntos fuertes de esta serie, su perfecto y épico capítulo final.

Recomendada no, lo siguiente, una obra maestra.

por Adrián Alfaro